Al presentarse como tesorero, el senador Francisco Domínguez se apoderó de las arcas del grupo

21/06/2013 05:57 Leticia Robles de la Rosa

CIUDAD DE MÉXICO, 21 de abril.- El conflicto en el grupo parlamentario del PAN en el Senado pisó ayer territorio judicial, después de que el calderonista Francisco Domínguez se apoderó de la Tesorería de la bancada, sacó cajas, despidió al personal y selló las instalaciones, mientras que el coordinador, Jorge Luis Preciado, solicitó el respaldo del Ministerio Público para dar fe del despojo y proceder a recuperar las oficinas.

Anoche, el senador Jorge Luis Preciado informó que reforzará la seguridad de la llamada Torre Azul para evitar que el fin de semana los calderonistas intenten tomar nuevamente el control económico del grupo parlamentario.

Anunció que levantará un acta circunstanciada de los hechos y analizará con el resto de los senadores la decisión de proceder o no en contra del compañero que cometió este “acto irresponsable”. 

José María Martínez, nuevo vicecoordinador del grupo, dijo que es posible de que Luis Canuto, director provisional de Administración “haga una denuncia de hechos respecto a lo que nosotros creemos es un acto irregular”.

Informó que los actos cometidos por Francisco Domínguez constituyen un claro despojo de un inmueble que legalmente está al resguardo de la Coordinación del grupo parlamentario y donde se colocaron cadenas, candados, se retiraron las chapas, se despidió personal y se colocaron sellos para evitar el ingreso, con base en un acuerdo que carece de legalidad.

Jorge Luis Preciado y José María Martínez informaron que el Estatuto aprobado por 23 senadores encabezados por Ernesto Cordero el pasado miércoles carece de legalidad, porque además de ser contrario al Estatuto del PAN también violenta la Ley General del Congreso, pues ambos depositan en el coordinador parlamentario la representación legal del grupo y la responsabilidad financiera, política y administrativa de la bancada.

También informaron que los hechos fueron notificados desde el primer momento al Comité Ejecutivo Nacional del PAN, que preside Gustavo Madero.

Luis Canuto relató que eran las 16:00 horas cuando se presentó ante él el senador Francisco Domínguez, con un papel en el cual se notificaba que era el nuevo tesorero del grupo parlamentario; le informó que nombró a Rafael Caraveo como encargado de la Tesorería y le explicó que estaba despedido.

El trabajador procedió a recoger sus objetos personales, mientras el senador Domínguez pidió a los trabajadores que se retiraran a sus casas, para posteriormente proceder a sellar el piso 1 de la Torre Azul, donde se ubica el cerebro financiero del grupo parlamentario.

Relató que Francisco Domínguez estaba acompañado de diez personas, incluido un notario público del que no se dio el nombre, y le pidió que le firmara el acuse de recibo. Una vez hecho esto, le pidió que se retirara.

Pero la historia empezó antes, cuando los senadores Juan Carlos Romero Hicks, Gabriela Cuevas, María del Pilar Ortega, Octavio Pedroza y el mismo Francisco Domínguez pidieron una reunión con Jorge Luis Preciado, quien estuvo acompañado por el vicecoordinador Ernesto Ruffo Appel.

Durante dos horas dialogaron. Los calderonistas querían que Preciado acatara el nuevo Estatuto, pero éste se negó, porque contiene puntos que contradicen la ley del PAN y del propio Congreso. Al no haber acuerdo, decidieron irse a consultar las posiciones y volverse a ver poco después de las 17:00 horas.

Sin embargo, en lugar de regresar a la mesa del diálogo, Domínguez se presentó en la Torre Azul, acompañado también de personal de Resguardo Parlamentario. En entrevista dijo que tenía en su poder la notificación de Ernesto Cordero, presidente de la Mesa Directiva del Senado, de que los estatutos aprobados por ellos habían entrado en vigor, y por lo tanto él era el tesorero.

Interrogado del porqué de tanta prisa, si estaban en una mesa de diálogo, Domínguez dijo que la prisa se debía a que al asumir la Tesorería se convierte en el responsable y no quiere que le atribuyan irregularidades que pudieran existir.

Poco después de las 17:00 horas se retiró. Momentos después salieron trabajadores con tres cajas de cartón, las cuales trasladaron en diablitos hacia la sede del Senado de la República.

A petición de Jorge Luis Preciado llegaron al lugar Rosa María Nedia García, agente del Ministerio Público Cinco de Cuauhtémoc; Daniel Luna Ramos, notario público número 142, y Ramón Galván Gutiérrez, corredor público 69 del Distrito Federal, como fedatario.

Procedieron a constatar la forma en que la oficina se encontró sellada. Ni Jorge Luis Preciado ni José María Martínez sabían que se habían sustraído tres cajas; fueron informados por los representantes de la prensa y explicaron que se hará el inventario correspondiente para detectar los faltantes y tomar las decisiones correspondientes.

Rechazan que haya divorcio

La senadora panista Gabriela Cuevas rechazó categóricamente que se viva un divorcio dentro de su bancada en el Senado. Aclaró  que con el aval de 23 de los 38 senadores del grupo parlamentario de Acción Nacional al nuevo Estatuto y con la creación de la figura del Tesorero se busca transparentar el manejo de recursos y “de ninguna manera”  se  pretende acotar las funciones del coordinador, Jorge Luis Preciado.

La meta última de este nuevo Estatuto, aseguró Cuevas Barrón,  “es encontrar una salida a la  crisis que vive  el PAN al interior, y  plantear nuevas formas de trabajo para  lo que resta de la Legislatura (…)  en un ambiente transparente y de rendición de cuentas”.

Entrevistada por Martín Espinosa, para Grupo Imagen Multimedia, Cuevas Barrón insistió en que “el nuevo Estatuto respeta la figura del coordinador, porque su nombramiento es facultad del presidente del partido. Además, nadie planteó destituir a Jorge Luis Preciado, nadie buscó menoscabar su poder”.

Al modificar el Estatuto,  enfatizó la  también coordinadora de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado,  “lo que se busca es que haya democracia interna en el PAN,  así como transparencia y rendición de cuentas, no sólo de nuestro coordinador, sino de todos aquellos que tenemos algún cargo dentro de la bancada.

“Todos vamos a estar obligados a pedir el apoyo a la bancada, a rendirle cuentas y a que las decisiones se tomen como cuerpo colegiado. Que así sucede en el resto de las bancadas”, ironizó.

Detalló que además de la creación de la figura de Tesorero se habilitó un Comité de Transparencia y  Rendición de Cuentas que estará integrado por varios senadores que “estarán revisando que todas las cuentas del PAN se vayan transparentando y la ciudadanía las pueda conocer”.

De la entrega de 16.3 millones de pesos  a los integrantes de la bancada, Cuevas aseguró “que nadie se lavará las manos” y que es necesario ir al fondo del problema, para determinar quién tomó esa decisión y emitir sanciones.

Reconoció que aún no regresa el dinero depositado en su cuenta, “dinero que jamás pedí y que no necesito ni para el trabajo legislativo ni para atención ciudadana”.