Honra Egidio a Marte R. Gómez

diciembre 17, 2013

 

A 40 años de su partida, Tamaulipas reconoce la trayectoria y el camino trazado por uno de sus hijos más grandes, el ingeniero Marte R. Gómez

 Torre Cantú expresa que inspirado en su ejemplo, “se trabaja siempre por el bienestar de la gente, ejerciendo un gobierno con orden, honestidad y firmeza”

 En el marco de la conmemoración se presentó el libro “Textos inéditos: Diego y sus mujeres” de la autoría del ex gobernador de Tamaulipas

 CD. VICTORIA, Tamaulipas.- El Gobierno de Tamaulipas, que dirige Egidio Torre Cantú, conmemoró el cuadragésimo aniversario luctuoso de Marte R. Gómez, ex gobernador de Tamaulipas e impulsor de las instituciones modernas de la entidad.

 Torre Cantú expresó que inspirado en su ejemplo, “se trabaja siempre por el bienestar de la gente, ejerciendo un gobierno con orden, honestidad y firmeza”.

 “Rendirle homenaje a los grandes de Tamaulipas es siempre un honor y una gran responsabilidad. Esta tarde, nos reúne la sobria figura de uno de los tamaulipecos que mejor encara el perfil del político justo, del gobernante humanista, del hombre con intelecto y con sensibilidad: Marte R. Gómez”, señaló.

 Torre Cantú dijo que, “a 40 años de su partida, Tamaulipas reconoce la trayectoria y el camino trazado por uno de sus hijos más grandes, el ingeniero Marte R. Gómez. Sirva este aniversario luctuoso para honrar la memoria de su vida y de su obra, para fortalecer el orgullo de ser tamaulipeco y orientar con su ejemplo nuestro devenir”.

 El acto cívico se llevó a cabo en el Salón de Convenciones del Centro Cultural Tamaulipas.

 Marcia García Leal, familiar de Marte R. Gómez, dio lectura a la semblanza del homenajeado y citó algunos de los acontecimientos más destacados de este ilustre personaje.

 Además, en el marco de la ceremonia se realizó la presentación del libro “Textos inéditos: Diego y sus mujeres”, a cargo de Libertad García Cabriales, titular del Instituto Tamaulipeco para la Cultura y las Artes y Esther Gómez Leal, hija de Marte R. Gómez quien mencionó que al ex gobernador se le ocurrió escribir sobre Diego Rivera cuando el pintor provocó un escándalo en el Hotel del Prado con “Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central”.

 “Cuando mi padre se retira del servicio público en 1946, nos vinimos a vivir a la Villa de Llera, al rancho Glera, hasta donde llegó la pintora y primera esposa de Rivera, Angelina Beloff”.

 Agregó que a partir de estas charlas nació la idea de crear el libro que ahora se presenta.

 El libro “Textos inéditos: Diego y sus mujeres” rescata apuntes diversos e inéditos de Marte R. Gómez sobre su relación amistosa con el artista mexicano Diego Rivera.

 Son bosquejos que el ex gobernador dejó en sus archivos y que han sido revisados y organizados por su hijo Marte y sus hijas Esther e Hilda Gómez Leal.

 El eje principal de este texto es el de las relaciones que tuvo el pintor con mujeres emblemáticas de su tiempo.

 Por las páginas de este compendio desfilan mujeres excepcionales como Lupe Marín, Frida Kahlo, Angelina Beloff, Marevna, Dolores Olmedo, Machila Armida, Tina Modotti, María Félix, Dolores del Río y muchas más.

 Se narra también la génesis y desarrollo de los murales de la capilla en la ex hacienda de Chapingo, a donde el ingeniero Gómez había trasladado la Escuela Nacional de Agricultura a iniciativa de Don Ramón P. Denegri, Secretario de Agricultura y Fomento, y del propio ingeniero Gómez.

 Destacan en la obra la erudición y la prosa de Marte R. Gómez, así como el retrato del México de entre 1920 y 1950.

 Al acto asistieron también Ramiro Ramírez Salinas, Presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado, Armando Villanueva Mendoza, Magistrado Presidente del Supremo Tribunal de Justicia, Alejandro Etienne Llano, Presidente Municipal de Ciudad Victoria, funcionarios, invitados especiales y público en general.

 Previo a la ceremonia celebrada en el Centro Cultural Tamaulipas, Libertad García Cabriales y Esther Gómez Leal realizaron una visita y depositaron una ofrenda floral en la Rotonda de los Tamaulipecos Ilustres, donde reposan los restos de Marte R. Gómez.